lunes, 14 de marzo de 2011

6. LA SEXUALIDAD, LA PROCREACIÓN Y LA FAMILIA

¿Cómo deben regularse las familias?



Tras llevar unos años en la isla, se fueron trazando lazos de amistad muy fuertes entre nosotros, también amores y desamores. Teníamos la necesidad de procrear, como cualquier ser humano, y además estábamos construyendo una sociedad que teníamos decidido que no se terminaría cuando nosotros falleciéramos, sino que intentaríamos prolongarla, ir mejorando, y vivir allí cómodamente, hasta poder ser rescatados y llevados a casa, o simplemente vivir allí para el resto de nuestros días.
Como habíamos decidido no terminar con la sociedad que habíamos empezado a construir, y como casi todo el mundo pasados unos años tenía una pareja, muchas chicas empezaron a quedar embarazadas. Mientras, debíamos pensar en qué medidas tomar, cómo alimentar a los futuros bebés, como procurarles el mejor embarazo posible para que los niños nacieran sanos, cómo sería el parto en las mejores condiciones higiénicas posibles.
Finalmente los conseguimos, tras unos años ya habíamos duplicado, e incluso triplicado el número de nuestra población. Por suerte, todos los niños nacieron sanos. Nos ocupamos de ellos lo mejor que pudimos, les enseñamos a leer y escribir, con los utensilios que habíamos desarrollado con el tiempo, y otras cosas básicas. Cada familia tenía su propia cabaña con sus comodidades. Con esto, ya no había tanta relación entre los antiguos compañeros, pero nos seguíamos reuniendo casi todos los días para hablar, mejorar esta sociedad y que los niños hicieran nuevas amistades.

1 comentario: